El Diafragma es el principal músculo responsable de la respiración.
Los órganos están recubiertos y se relacionan entre sí dentro de la cavidad visceral mediante unas membranas serosas, que a la vez, funcionan como ligamentos, que permiten deslizar, sujetar y sostener a los diferentes órganos, entre sí.
La falta de lubricidad y viscosidad en estas membranas, crea restricciones de movilidad y tensiones en el conjunto visceral, alterando el equilibrio interno, y las funciones automáticas de motilidad y motricidad visceral.
Estas adherencias y tensiones viscerales, provocan descompensaciones en las cadenas musculares y restricciones de movilidad en la zona escapular y pélvica, alterando el equilibrio, la economía muscular y generando disfunciones en el aparato músculo-esquelético, dolor muscular, y alterando la postura.
Respiración, relajación visceral y liberación fascial:
Los ejercicios de respiración movilizan las vísceras y los tejidos de la cavidad torácica y abdominal.
Los ejercicios de relajación nos aportan conciencia corporal y nos ayudan a liberar tensiones interiores.
Los ejercicios liberación miofascial mejoran la hidratación y viscosidad de las membranas serosas, regenerando este potente y necesario líquido lubricante natural, que mejora las funciones y las relaciones entre órganos, dentro de la cavidad visceral.
Los ejercicios Hipopresivos y el entrenamiento Low Pressure Fitness, trabajan de forma global la liberación del diafragma y la activación de la musculatura de la faja abdominal, reduciendo la presión en el suelo pélvico. Una manera excelente de trabajar la musculatura abdominal sin riesgo, a través de la apnea y la apertura de las costillas en diferentes posiciones. La técnica Low Pressure Fitness, además, añade la activación global de las cadenas miofasciales y técnicas de neurodinámica en sus diferentes posturas y ejercicios para recuperar la co-activación y la funcionalidad respiratòria entre diafragma y suelo pélvico.